Cambios

Yo tengo dos lemas de vida: 1.- La vida es un cambio constante, todo cambia y rápido. y 2.- No puedes cambiar a las personas. suena fácil, pero no lo es, esto lo he aprendido a través de mis experiencias.

Les cuento que vengo de una familia "sustituta" ya que mis padres biológicos no me quisieron en sus vidas. Los primeros dos años de mi vida los pase en un hogar de cuidados, de estos años no me acuerdo nada. Me adoptaron a los dos años, una pareja mayor que no podía tener hijos, fuí su hija por elección. Gracias a Dios por ellos, unos seres maravillosos, a partir del momento en que fuí adoptada empezo mi verdadera vida con mi verdadera familia, gracias a ellos pude tener todo lo que un niño puede esperar: cariño, educación, amor y quien sabe si mis otros padres me hubiesen podido ofrecer eso. Yo me entere de esto cuando tenía diez años, y claro que sentí frustración y rabia con mis padres biológicos porque me desecharon, tuve sentimientos encontrados, sí buscar a mi madre biológica o no. Al fin, lo deje así, pero quien sabe si ellos cambiaron de opinión con respecto a mi.

Hace cuatro años mi madre fue diagnosticada con cancer de pancreas: un adenocarcinoma, y con menos de tres meses de vida, este fue el peor golpe de mi vida. Las cosas cambian, cambian rápido. Pero mis padres verdaderos no quisieron cambiarme (no como los biológicos), me aceptaron por como era, pero me costaba aceptar la enfermedad de mi mamá, no quería cambios en mi vida, los quería a ellos. Mi madre vivió cuatro meses más de lo que los médicos pronosticaron, valientemente los paso. dandonos todo lo que ella podía, y nosotros aceptamos la situación y tratamos de hacer lo posible porque se sintiera bien. En muchos de esos momentos con mi mamá enferma, mi novio me falló, pero bueno, qué se puede esperar cada persona reacciona distinto, y eso lo agradezco ya que es la mejor forma de poder conocer el mundo.

Mis padres me han enseñado dos cosas. Todo cambia, pero cada persona cambia por decisión propia. Suena fácil, verdad.

La Primera Vez

Las primeras veces suelen ser inolvidables y además suelen recordarse con un toque nostalgico romanticon, ejemplos como el primer beso, la primera vez que hiciste el amor, y hasta tu primer sueldo recibido; son gratos momentos.
Aunque, también están otras "primeras veces" amargas como el primer despido o renuncia de un trabajo, o la primera pelea con tu novio/a, de esta última quiero hablar.

A veces esa primera pelea suele ser la última, pero en otros casos no. Yo recuerdo muy bien mi primera pelea seria con él. Fue después de un par de años de salir juntos. Yo estaba preocupada por su comportamiento cada vez más extraño y evasivo, y le dí mucho espacio al principio. Pero, un día no aguante más y saliendo de clases tuve que encararlo y preguntarle lo que más temía:

Yo: "¿qué te pasa, por qué te estas alejando tanto de mi? casi no hemos hablado por más de dos semanas, sólo nos saludamos en la universidad, y ni siquiera me has llamado. ¿acaso ya no me amas?
Él: No pasa nada, solo que este semestre ha sido díficil, me han mandado muchos trabajos.
Yo: ¿Qué? tú sabes que eso no es del todo cierto porque siempre te la pasas hasta tarde con tus amigos? ¿por qué no puedo salir contigo y tus amigos?
Él: (ofuscado) PORQUE TÚ OCUPAS DEMASIADO TIEMPO, EN DONDE TE VEO ESTAS.
Yo: ¿qué quieres que me cambie de carrera? Nos vemos todos los días porque estudiamos lo mismo, pero eso no significa que todos los días tenemos que salir juntos y tampoco que sólo nos veamos en la universidad. Tenemos que tener equilibrio.
Él: QUIERO QUE DEJES DE SER UN CHICLE.
Yo: Muda... (cara de asombro. En mi mente se escucha: ¡Que Bolas! ni que yo lo acosara, casi ni lo llamo por teléfono, siempre estoy con mis amigas ¿qué le pasa?) a él, le digo: Ok, no te molesto más- y acto seguido camino lo más rápido que pueda lejos de él.

No lo quiero ver, quiero que me deje. No quiero que me vea desboronarme. Pero él me sigue detrás, yo le digo: "dejame tú en paz, no me sigas". él me dice: "No, no te voy a dejar sola en ese estado".
Yo: ¿En qué estado? DEJAME IR AL MENOS CON UN POCO DE DIGNIDAD. (Ya no puedo conterme más, no puedo llegar a mi casa y silenciar mi llanto en la almohada). Lloro.
Él: NO, por qué te pones así.
Yo: JA, JA! por qué crees ---mientras le grito a unas personas curiosas--- ¿Y USTEDES QUÉ VEN NUNCA HAN VISTO A NADIE LLORAR?"
Él: Vamos a la casa para que te calmes, te amo, no te tomes las cosas tan a pecho.
Yo: ¿me amas? ¿Me amas y me dijiste que no te dejo ni un segundo? ¿me amas? JA!
Él: Si, TE AMO, coño. Ahora, vamos para la casa.
Yo: Ok--- y pienso---

Es mejor que me lleve porque en este estado no se donde ir. ESTOY EMOCIONAL Y FISICAMENTE AGOTADA, eso es lo que siento.

Defectos

Todo el mundo tiene defectos, algunos pueden ser muy pequeños y fastidiosos como masticar con la boca abierta; pero, hay otros que son casi imperdonables en especial en una relación de pareja. ¡Oh, pero el amor es ciego!

Empece a notar comportamientos que me desagradaban de parte de él. De todos estos, el que más me molestaba era su capacidad para desaparecer en momentos díficiles y/o importantes de mi vida, por ejemplo, con la muerte o enfermedad de un familiar cercano; la persona que más necesitaba no estaba, simplemente hacía sus trucos de mago y puff!, no había forma de contactarlo. Pero, esto también podía pasar en fechas importantes como aniversarios o cumpleaños, siempre buscaba una excusa para pelearse conmigo y desaparecer, dejandome triste. Sin embargo, cuando aparecía otra vez mis ojos se iluminaban y todo lo pasado se borraba de mi mente. Sí el amor es ciego, y en mi caso también amnesico.

Y ustedes se preguntaran, ¿qué pasó con el asunto de los celos y los engaños? ¿acaso va a dejar ese asunto inconcluso? Les respondo de una vez: no, es una historia muy larga y estoy describiendo todo el contexto.

Y empezaron los celos

Al principio no sentía celos porque él no me daba motivos, pienso yo, casi que, todo su mundo era para mi. Pero, siempre un pero, las cosas cambian y empece a notar miradas raras y coqueteos entre él y otras mujeres (él decía que amigas), era muchisimo coqueteo. Me preguntaba "¿qué puedo hacer para qué no haga eso más ya que me molesta?" y se lo dije, le dije que me dolía verlo hacer eso, él lo ignoro dijo que "eran loqueras premenstruales o algo así, que me dejara de payasadas".


Y en ese preciso momento empezaron los celos, ahora yo respondí de otra manera, me hice la fria, la dura, todo se lo decía con la mirada, empece a odiar a las tipas que se le acercaban me empece a convertir en una cuaima celopata oculta. Cada vez que lo veía con una mujer no le hablaba, no lo saludaba, nada, me quedaba inmovil y seguía mi camino, pensaba que lo mejor era hacerme la que no le molestaba cuando en realidad se me notaba la rabia. Me ODIE, ODIE mi actitud, al fin y al cabo el no me daba más motivos para estar celosa. JA! como me equivocaba.

Así lo conoci

Al hombre que me tiene loca lo conoci el la universidad, hace más de cinco años. Él me busco, ¿cómo era? un tipo lindo, inteligente y un poco mayor que yo. Estudiamos la misma carrera... él me vio un día y sencillamente le guste, empezamos a hablar más que todo por messenger porque él era timido y yo también.

Después de varias semanas, de varios gustos compartidos y de muchos coqueteos, llegamos a nuestra primera cita. Tipica primera cita, cine y cena, yo sintiendo mariposas en el estomago. Por supuesto, que ya yo había tenido otros novios; pero nunca me había sentido así. ¡Estaba ENAMORADA! fue amor a primera vista, y eso que me dije "tienes que tener cautela", pues, no. Ya al mes estabamos durmiendo juntos casi que todas las noches, bañandonos, saludandonos por la ventanita del salón de clases y haciendonos muecas, caminando por la ciudad ajenos al mundo. Dios, era perfecto. De hecho fue perfecto por más de dos años (eso es lo que dicen los cientificos que dura la etapa del enamoramiento, entre dos a cuatro años). Después vinieron los problemas, que ni se por qué ni cómo empezaron. Bueno, si se; fue mi culpa.

Según los cientificos el Amor es una enfermedad. Es una enfermedad agridulce.

XOXO A.

quien soy

no les voy a decir; les dire que soy una mujer, profesional, de veintitantos. Aparentemente mi vida es bastante normal, o incluso feliz, pero en apariencia. En este blog me planteo escribir todos mis recuerdos, en especial referidos a mis relaciones con los hombres. También de mi misma, de mis neurosis, y de mi "verdadero YO", El cual no es muy bonito. ¿acaso lo somos?

Sigan a esta mente inestable.